Las clases empiezan demasiado temprano

Entérese cómo comenzar las clases más tarde puede ayudar a los adolescentes a dormir lo suficiente y mejorar su salud, desempeño académico y calidad de vida.

Una niña durmiendo en la clase

Es común que los estudiantes de escuela secundaria superior no duerman lo suficiente y esto se asocia a varios riesgos para la salud (como tener sobrepeso, beber alcohol, fumar tabaco y consumir drogas) así como a un desempeño académico deficiente. Una de las razones por las cuales los adolescentes no duermen lo suficiente es que las clases empiezan temprano. La Academia Estadounidense de Pediatríaexternal icon* recomendó que las escuelas secundarias media y superior comenzaran a las 8:30 a. m. o más tarde para dar a los estudiantes la oportunidad de dormir lo necesario; sin embargo para la mayoría de los adolescentes en los Estados Unidos las clases comienzan demasiado temprano.

Según el estudio Políticas y Prácticas Escolares Relacionadas con la Salud del 2014,* el 93 % de las escuelas secundarias superiores y el 83 % de las escuelas secundarias medias en los Estados Unidos comenzaban antes de las 8:30 a. m.

Un estudio anterior de los CDC* en el que se analizaron los datos del Departamento de Educación de los Estados Unidos para el año escolar 2011-2012 indicó lo siguiente:

  • 42 estados reportaron que la mayoría de las escuelas secundarias media y superior (75-100 %) comenzaban antes de las 8:30 a. m.
  • El porcentaje de escuelas que comenzaban a las 8:30 a. m. o después variaba ampliamente por estado. Por ejemplo:
    • Ninguna escuela en Hawái, Misisipi o Wyoming comenzaba después de las 8:30 a. m.
    • La mayoría de las escuelas en Dakota del Norte (78 %) y Alaska (76 %) comenzaba después de las 8:30 a. m.

Los adolescentes y el sueño

La Academia Estadounidense de Medicina del Sueñoexternal icon* recomienda que los adolescentes de 13 a 18 años de edad duerman regularmente entre 8 a 10 horas al día para tener buena salud. Los adolescentes que no duermen lo suficiente tienen mayores probabilidades de lo siguiente:

  • Tener sobrepeso.
  • No hacer actividad física a diario.
  • Sufrir síntomas de depresión.
  • Adoptar comportamientos de riesgo como beber, fumar y consumir drogas ilícitas.
  • Tener un desempeño deficiente en la escuela.

Durante la pubertad, los adolescentes sienten sueño más tarde en la noche y necesitan dormir hasta más tarde en la mañana debido a los cambios en su ritmo biológico.1 Estos cambios biológicos a menudo están combinados con malos hábitos para el sueño (como irse a dormir a horarios irregulares y tener aparatos electrónicos en el dormitorio).2 Durante la semana escolar, la hora de comienzo de las clases es la principal razón por la que se despiertan a la hora que se despiertan.3 La combinación de acostarse tarde y comenzar la escuela temprano tiene como resultado que la mayoría de los adolescentes no duerme lo suficiente.

Estudiantes alertos

Un sueño adecuado permite un mejor desempeño académico.

Todos podemos cumplir un papel importante

Profesionales de la salud

  • Eduquen a sus pacientes adolescentes y a los padres sobre la importancia de un sueño adecuado y los factores que contribuyen a que los adolescentes no duerman lo suficiente.

Funcionarios escolares

  • Infórmense más sobre las investigaciones que muestran una relación entre el sueño y las horas de comienzo de clases. La combinación de buenos hábitos para dormir y horarios escolares más tardes permitirá que los adolescentes estén más sanos y que puedan tener un mejor desempeño académico.

* Los enlaces a sitios web pueden llevar a páginas en inglés o español.

Más información (en inglés)
Referencias
  1. Crowley SJ, Acebo C, Carskadon MA. Sleep, circadian rhythms, and delayed phase in adolescence. Sleep Med. 2007;8:602–12.
  2. Bartel KA, Gradisar M, Williamson P. Protective and risk factors for adolescent sleep: a meta-analytic review. Sleep Med Rev. 2014;21:72–85.
  3. Knutson KL, Lauderdale DS. Sociodemographic and behavioral predictors of bed time and wake time among US adolescents aged 15 to 17 years. J Pediatr. 2009;154:426–30, 30 e1.
Esta página fue revisada el: 12 de junio de 2020